Vacaciones: una oportunidad de crecer.
Inician las vacaciones y la mayoría de quienes las toman son estudiantes. Este periodo no debe ser tomado en vano y malgastado, ya que en éste podemos desarrollar y enriquecer todos nuestros conocimientos y habilidades. sobre todo, fomentando el bienestar mental, espiritual y físico de manera personal, ayudando a impulsar la convivencia y unión familiar o colaborando, de manera vital, en nuestra parroquia, dando catecismo, haciendo oración o dirigiendo un grupo.
Las vacaciones, una oportunidad para disfrutar
El periodo vacacional se acerca y para muchos jóvenes estudiantes es la oportunidad que tienen para disfrutar actividades físicas o recreativas, sin descuidar la convivencia familiar o los quehaceres de la casa; otros, podrán visitar lugares del estado, del país o del extranjero; y, algunos más dedicarán más tiempo a las actividades de apostolado que realizan en su parroquia.
Las vacaciones, tiempo de compartir
Las vacaciones ya empezaron y es una oportunidad para aprovechar el momento en diversas ocupaciones, como el visitar un lugar, ver las riquezas que tiene nuestro país, practicar un deporte, participar en cursos de verano o simplemente tirarse en la cama.
Sin embargo, hoy la iglesia nos pide dedicar un poco más de tiempo para los demás, colaborando en grupos de catequesis, en misiones u otros apostolados.