Alberto López Gómez, diseñador indígena tsotsil de Chiapas, desafió los roles de género y estereotipos de su comunidad al seguir su pasión por el tejido, considerado tradicionalmente como una tarea femenina. Aprendió el arte del telar de cintura y fundó su negocio de textiles, Kuxul Pok. En 2020, desfiló en Nueva York, destacando su éxito a nivel internacional. Alberto promueve la igualdad de género al emplear a 150 tejedoras de su comunidad y alentar la participación de hombres en el equipo. Su historia representa una ruptura de estereotipos, una redefinición cultural y una celebración de la riqueza artesanal de México.